La leptina solución a la obesidad y el sobrepeso.

Ya de sobra sabemos que la obesidad y el sobrepeso, son la causa de la mayoría de las enfermedades que generan la muerte y la enfermedad crónica, especialmente en los países del primer mundo. En España, la prevalencia de la obesidad en adultos es aproximadamente del 40% entre personas de 25 y 65 años, pero no olvidemos que más de un 40 % de los niños entre 6 y 9 años tienes sobrepeso, cifra escalofriante.

Hemos de clarificar ahora la diferencia entre pesar mucho y tener un alto porcentaje de grasa corporal. A igual peso pero un alto porcentaje de masa muscular, y bajo nivel de grasa, que al contrario, nos indica una situación de salud. Una buena masa muscular será un buen receptáculo de glucógeno que nos aportará mayor energía, a la vez que una mejor sujeción y protección de nuestro esqueleto y por supuesto de nuestros órganos internos.

Además, hay dos tipos de tejido adiposo, el tejido blanco, encargado de almacenar triglicéridos y convertirlos en energía de reserva, este tipo de grasa incrementa descontroladamente con una mala alimentación, acumulándose en exceso como consecuencia de ello, y generando a su vez una mayor facilidad de generar resistencia a la insulina y la leptina. Y por otro lado el tejido adiposo marrón, acumulado en menor medida y que tiene funciones de termorregulación corporal y regulación metabólica. La grasa blanca es la que está estrechamente relacionadas con el Síndrome Metabólico, lo que favorece la aparición de numerosas enfermedades, como la Diabetes tipo II, enfermedades Cardiovasculares, o algunos tipos de Cáncer, entre otras.

La leptina es una sustancia que nos hace controlar el apetito y con ello regular el peso corporal, pero cuando se va produciendo una acumulación de grasa blanca, y ésta es excesiva, el tejido adiposo comienza a segregar unas sustancias proinflamatorias, que harán que se produzca una resistencia a la leptina. Esto hará que perdamos nuestra principal ayuda para el control de apetito, y que nos estimula a  la realización de actividad física, lo que nos llevará a una mayor posibilidad de seguir aumentando de peso, y con menos posibilidad de conseguir bajarlo.

 

Por ello la leptina puede ser una de las claves para la pérdida de peso, deberemos tener una alimentación saludable, basada en el consumo de vegetales, una proporción adecuada de proteína de calidad, y grasas saludables, como son los pescados azules, los frutos secos, el aguacate o el aceite de oliva virgen extra. Además será fundamental comenzar progresivamente a realizar ejercicio físico, dentro de nuestras posibilidades y poco a poco ir aumentándolo, esta es la clave para conseguir un peso adecuado y una mejor calidad de vida.

 

1 comentario

Trackbacks y pingbacks

  1. […] esta fase aumenta el apetito, porqué disminuye la sensación de saciedad (baja sensibilidad a la leptina)….y especialmente tendrás más ganas de alimentos dulces, pero es el peor momento para tomarlos […]

Dejar un comentario

¿Quieres unirte a la conversación?
Siéntete libre de contribuir!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

*