El té Kombucha un gran aliado de tu intestino.

Aunque verás diferentes posibilidades, yo aquí te explico como puedes preparar tu propio té Kombucha, que será un magnifico refresco, lejos de cualquier bebida llena de gas y azúcares o edulcorantes que encuentres en el supermercado, que solo te restan salud. El té Kombucha no es óptimo para todo el mundo, por supuesto, pero eso pasa con absolutamente todos los alimentos, cada ser humano tiene su propias necesidades, pero si te puedo decir que es un magnífico probiótico, que ayudará a cuidar tu intestino.

Lo primero será adquirir un scoby. El SCOBY es un cultivo simbiótico de bacterias y levaduras, que es la base con la que producir la bebida, éste le puedes comprar o te la pueden regalar, como es mi caso, que me la dio un buen amigo. Al ser un elemento vivo se reproduce y pasado un cierto tiempo tendrás más scobys de los que necesitas, entonces será maravilloso cedérselo a alguien para que también pueda disfrutarlo. Eso sí, requiere unos cuidados, aunque no demasiados, para mantenerlo vivo y que te siga dando durante años esa bebida....que espero te guste.

Ingredientes:

1 scoby

50 g de azúcar por cada litro de agua filtrada (no clorada)

1 cucharada sopera de té verde de calidad, aunque puedes poner otros tés (negro o rojo)

Un poco del propio té kombucha o 1 cucharada sopera de vinagre de manzana (solo si no tienes té Kombucha de base), para bajar el pH .

Preparación:

• Hierve el agua en una olla grande y retírala de la fuente de calor, añade las cucharadas de té y deja que infusione durante unos 10 minutos. También puedes hacer las 3 cucharadas en poca agua, un té concentrado y después añadir el resto del agua.
• Añádele el azúcar, mejor blanca, ya que a veces la integral colorea excesivamente la mezcla, remueve para que se disuelva bien. El azúcar será el alimento para que produzca la fermentación.
• Posteriormente retira las hojas de té, ya que sino puede amargar demasiado
• Deja que se enfríe totalmente la infusión.
• Incorpora el té azucarado a un recipiente de vidrio grande y vierte encima un poco de té kombucha ya hecha. Si no tienes, también se puedes usar un poco de vinagre de manzana para ayudar a bajar el pH, lo que ayuda a prevenir la formación de moho en el SCOBY.
• Recuerda que no puedes introducir el SCOBY si el agua está caliente.
• Cubre el recipiente de vidrio con un trapo muy fino o incluso una servilleta gruesa de papel, para no dejar pasar el polvo y los insectos, pero si el aire. Puedes sujetarlo con una cinta o una goma. El papel de cocina también sirve.
• Deja la mezcla reposar durante una semana antes de su consumo, será más o menos tiempo dependiendo de lo fuerte que lo quieras.
• La temperatura ideal es entre 20 y 27ºC, es decir en un lugar de tu casa donde no haga demasiado calor, y haya un poco de oscuridad. Si hace una temperatura más baja tardará más tiempo en desarrollarse y será más fácil que generen mohos. Para compensar puedes echarle un poco más de kombucha a la mezcla para bajar aún más el pH. Si por el contrario la temperatura es más alta fermenta rápidamente y favorece las creación de levaduras, por ello intenta encontrar el lugar adecuado, para que se sienta como en su casa.
• Ahora nuestro té está list0, según pasan los días se hace menos dulce y más agria. La mayoría de la gente prefiere parar la fermentación después de unos 7-10 días.
• No toques demasiado el nuevo SCOBY que se forma en la parte superior.
• Puedes ir repitiendo la operación las veces que quieras, y si por casualidad no quisieras preparar alguna semana, solo tienes que dejar el scoby con un poco de té Kombucha en la nevera, hasta el momento en que lo quieras preparar.
• Puedes añadirle fruta en trozos o zumo de fruta, depende del sabor que quieras darle.
• Recuerda que el té ya preparado también debe mantenerse en una botella de cristal, evita al máximo el plástico, tanto para la elaboración como para el consumo. Siempre bien cerradas.
• RECUERDA: Es algo vivo....será una experiencia cambiante.